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Decoloración del vello
Decoloración del vello
La decoloración del vello no es un método de depilación, pero es importante mencionarla porque su función es ocultar el vello y en ciertas áreas con poco vello, como brazos, rostro, antebrazos, o la zona que rodea al ombligo, en las que no es tan habitual la depilación, la decoloración puede ser un sustituto de ésta.
Se utilizan productos químicos para la decoloración de los vellos, los cuales pueden reaccionar a la acción de la luz solar o bien pueden requerir la aplicación durante un determinado tiempo para luego ser retirados.
Ventajas
- Se disimula el vello corporal si éste no es demasiado grueso o espeso.
- Rápido, cómodo, barato e indoloro.
- No afecta al crecimiento del vello.
- Dura aproximadamente un mes.
Desventajas
- No es una eliminación estricta del vello como en la depilación.
- Tiene un olor fuerte.
Procedimiento
Si es la primera vez que vas a utilizar un producto decolorante para el vello corporal, te aconsejamos que realices una prueba en una zona pequeña para comprobar que no se produce ninguna reacción en tu piel, ya que pueden provocar irritaciones.
No lo apliques sobre mucosas, heridas u otras lesiones cutáneas ni expongas tu piel a los rayos solares justo después de haberte realizado la decoloración. Siempre espera que pasen unas horas para tomar el sol y no olvides usar una protección solar con el filtro adecuado.
1. Antes de utilizar estos productos decolorantes, lava la zona a tratar con agua y jabón, y después sécala bien con una toalla suave sin friccionar la piel. No uses estos productos después de un baño o una ducha, porque la piel está más sensible.
2. Prepara el producto decolorador, que normalmente se presenta en dos envases, uno a base de agua oxigenada (en forma de crema, gel o líquido), y otro con la sustancia decolorante (en crema o en polvo). Sea cual sea su forma de presentación, deben ser mezclados justo antes de ser utilizados y siempre siguiendo las instrucciones del fabricante.
3. Una vez preparada la sustancia decolorante, la aplicas sobre la zona a tratar con la ayuda de una espátula, de madera o plástico. Déjala actuar durante 15 minutos (comprueba la duración que muestra la caja).
4. Retira el producto con la espátula y los restos del mismo con abundante agua tibia y sécate con una toalla efectuando ligeras presiones.
5. Por último, aplica una crema hidratante masajeando la zona ligeramente.
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